Este
pasado sábado, un nutrido grupo de socios y amigos, se desplazaron hasta la
ciudad jiennense de Alcalá la Real para disfrutar de sus monumentos y
edificaciones típicas.
Esta
actividad se ha preparado como complemento de la conferencia que sobre el uso
de la piedra impartió en nuestra sede D. Jorge Moreno.
En la agradable compañía de Julia Marín -guía oficial de la ciudad- paseamos por el barrio de San Juan mientras nos proporcionaba abundante información sobre el paseo de los Álamos, la Iglesia de La Consolación, Ayuntamiento y otras edificaciones interesantes.
Ya
por la mañana pudimos asombrarnos con los restos de la impresionante Fortaleza
de la Mota, que alberga la antigua ciudad amurallada de Alcalá la Real. Esta, y
los diferentes elementos de arquitectura militar de su entorno, sirven como
punto de referencia para conocer y explicar el proceso temporal y espacial
ligado a la evolución de la frontera árabe-cristiana durante la Baja Edad
Media, al tiempo que sirve como ejemplo de desarrollo urbanístico en el
interior de una ciudad intramuros en el periodo que abarca desde el S. XIV al
s. XVIII.
De todo el extraordinario Conjunto Monumental de la Fortaleza de la Mota, podemos destacar la Iglesia Mayor Abacial y La Torre del Homenaje que es la máxima altura (1,033 metros) de Alcalá la Real. Todo ello, unido a la belleza de su entorno natural, constituyen un marco incomparable para la presentación de los valores del patrimonio cultural y paisajístico de una de las zonas más atractivas de Andalucía.
La visita se completó con un recorrido por el interior del Palacio Abacial que alberga en la actualidad el Museo de Alcalá la Real y una oficina de información turística.
Aunque
el tiempo no nos acompañó precisamente, pudimos disfrutar de un día en el que la
proverbial hospitalidad de Marcelino Serrano y su hija Blanca, además de la
grata compañía junto con las propuestas culturales que nos ofrecen en Alcalá la
Real, pusieron la guinda a un sabroso pastel.
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